Romance Rivera

ROMANCE RIVERA

I

He querido conquistarte,

hasta los lagos del norte;

pero estoy sin pasaporte,

y no sé cómo atraparte;

tengo Bisio de buscarte,

con Ansina y desespero,

y lograr ser el primero

en el Paso de la Hormiga.

¡Por La virgencita, amiga

si no te tengo me muero!

II

Solo de verte Rivera,

se me despierta El Fortín

y el planalto sin postín

te toca la Caja Obrera.

Me he ganado una Pedrera,

por mi vil atrevimiento;

Pero por ser  Livramento,

me declaro dos Misiones

¡Conquistar tus Camelones

y violar tu sacramento!

III

Tengo la Piedra furada,

de ver tu cuñapirú,

pero faltándome tú,

siento el alma silenciada.

¡Muchacha, Rivera amada,

He perdido la razón!

Y me llega un Lagunón

mezclado con parsimonia,

de la Rampla a Villa Sonia,

que me Raca el corazón.

IV

Los Treinta y tres orientales

son testigos del Progreso

que he tenido. Y le confieso

a Don Bosco y a otros tales,

que mis fines son reales;

hasta guerra sin Cuartel.

Que ni la Santa Isabel,

y ni la Santa Teresa,

te evitarán ser la presa,

de este Insausti Coronel.

V

Desde las Quintas del Norte

sé que me miras perpleja,

y te sientes Lavalleja,

cuando a veces te doy corte.

Ni un Recreo, ni un deporte,

me quita lo pensativo.

Siendo yo, Legislativo

me comí tu Mandubí;

y después me aparecí

con el Saavedra festivo. 

VI

Sin tapujos ni demora,

me dijiste desde arriba:

-Si quieres besar La Estiba

y bailar Piedra de mora,

olvídate de la hora

y me traes un Pueblo Nuevo,

que de aquí yo no me muevo,

hasta que me hayas besado

el Marconi y el Estado,

que con eso, yo me elevo.

Seudónimo: El Licenciado del verso

Erick Klein Sanabria