HOMBRE DE MUCHAS LUCHAS
Mi canto es para ti hombre de muchas luchas cual David frente Goliat sin temor a lo gigante, sin temor a lo imposible, No mirabas con tus ojos insistías en mirar con tu corazón, no veías madrugadas, ni mañanas, ni crepúsculos, ni auroras; no veías los minutos, ni segundos; ni esquemas, ni argumentos; ni la lluvia, ni la tormenta; ni la distancia, ni lo lejos; ¿Entonces que tú veías hombre de muchas luchas? no veías lo que vemos no veías el dinero, ni el salario ni los dueños, ni la ropa, ni el calzado ni siquiera tu yo interno ¿Entonces qué tú veías hombre de muchas luchas? estoy seguro que tú no veías lo que nosotros vemos tu mirada era sublime sublime como el viento que limpiaba los escombros que dejan los sentimientos ¡Ahora sé lo que veías! tú veías mas allá, de lo que nosotros vemos tú veías lo concreto, lo soñado, lo insurrecto lo forjado, lo divino, lo que será y no lo que es TÚ, PASTOR MATOS tu veías como el Dios